¿Qué novedad tiene Premios Casandra en esta edición? Premios Casandra es ya una marca-país, y en esa dirección, estamos trabajando para que el evento también sea atractivo para el mercado internacional. Es por ello que la producción está involucrando a artistas reconocidos no sólo en República Dominicana, sino en otros mercados como Estados Unidos y América Latina. Seguiremos apostando a un evento ágil, con una producción a la altura de cualquier otra premiación de su género, pero siempre reconociendo lo mejor del arte dominicano en todas sus manifestaciones.
A pesar del poco tiempo que tienes como presidente de Acroarte, ¿Qué has logrado? Han sido seis meses trepidantes. En el aspecto institucional, retomamos las actividades recreativas e impulsamos las tertulias culturales. Iniciamos los trabajos de remodelación de nuestra sede, que ya está lista para su reinauguración. En octubre, Acroarte se sometió a un proceso de reformas internas que se hacían necesarias, y a modificaciones de criterios que nos permitieron actualizar los reglamentos que rigen al Premio Casandra. Con nosotros nace el Premio al Mérito Periodístico, como una necesidad de reconocer a los miembros de la institución. En lo que tiene que ver con el Casandra, hicimos el relanzamiento de la página web; se han creado nuevas categorías, entre ellas, «Programa regional de entretenimiento», «Casandra del público», y «Comunicador en el extranjero». Más o menos así ha ido la gestión del actual Comité Ejecutivo, que todavía tiene en carpeta proyectos interesantes que llevar a cabo en este período.
¿De qué manera convencerías al pueblo y a la clase artística de que el proceso de nominación y premiación se realiza de la forma más justa posible? Leí hace poco unas declaraciones del actor británico Daniel Radcliffe criticando fuertemente a la Academia de Hollywood porque nunca le nominó al Oscar por su trabajo en la saga Harry Potter. Hemos visto críticas al Grammy Latino, al Grammy, al Emmy, al Goya y a los Globos de Oro, para citar algunas de las premiaciones más populares en el país. El Casandra siempre tendrá sus críticos, y nuestros esfuerzos van más encaminados en reconocer lo mejor de lo nuestro en el arte clásico y popular, que en convencer a la gente sobre el proceso de nominación y premiación.
Siempre se ha cuestionado la presencia de muchos miembros de Acroarte, ¿Qué tan difícil será el proceso de membresía en tu gestión? Como parte de la reforma a los estatutos que se aprobaron durante tres asambleas en octubre del año pasado, introducimos una nueva cláusula para reforzar los requisitos para el ingreso de nuevos miembros. Soy partidario de que Acroarte debe ser cada vez más selectiva en este proceso y acoger aquellos periodistas y comunicadores que pueden aportar al desarrollo de la institución. Más que incentivar el fichaje indiscriminado de nuevos miembros, debemos concentrarnos en impulsar planes e iniciativas a beneficio de los que ya están.
