Sin importar lo complejo o sencillo que fuese el encuentro entre amigos, antes de recibir invitados en casa debemos tener siempre en cuenta la regla de oro de todo buen anfitrión: proporcionar a quienes nos visitan el ambiente más agradable posible, donde estos se sientan tan cómodos como lo estarían en sus propias casas; relajados y del todo ajenos a las tensiones que provocan el estrés del trabajo y las responsabilidades de nuestro diario vivir.

Lo primero

Para planificar un encuentro en casa exitoso empezaremos por hacer una lista con los nombres de las personas que conformaran el grupo. Esto parece simple, pero es prudente tomar en cuenta que en este tipo de reuniones no es conveniente mezclar personas tan dispares que no tengan absolutamente nada en común.

Espacio físico

Un anfitrión inteligente no deja nada al azar. Debemos contar con el espacio físico adecuado para evitar que las personas se sientan como en una “lata de sardinas”, además de proveerles asientos cómodos y suficientes para que cada quien tenga asegurado uno, sobre todo cuando se trata de una cena.

Detalles para decorar

No es necesario que agotemos nuestro presupuesto redecorando la casa para la ocasión, pero sí podemos agregar detalles de buen gusto para resaltar los espacios, tales como flores o velas aromáticas. Algo para tener en cuenta es que algunas personas son alérgicas a ciertas fragancias, para evitar inconvenientes; si te inclinas por usar flores trata de que éstas sean de las más genéricas. ¿La mejor opción? Rosas.

En el caso de productos aromatizantes, prefiere las esencias de vainilla, limón o canela.

No olvides tener neveras portátiles para almacenar hielo y también para enfriar las bebidas que lo ameriten. Procuremos evitar traer a conversación temas controversiales que generen diversidad de posturas y opiniones divididas, como son los relacionados a religión, política y preferencias sexuales.

Marcando el paso con la música

Es importante que selecciones los ritmos apropiados y acordes al momento. El volumen nunca debe interferir con las conversaciones, debe ser tan moderado que permita la charla sin necesidad de levantar la voz, y es oportuno que si decides hacer del encuentro una ocasión bailable, selecciones un área que se encuentre algo apartada del lugar donde se concentraran los invitados. Así, los que deseen continuar conversando no recibirán interrupciones.

Brindemos

Lo que decidamos ofrecer como brindis es lo que nos consagrará como buenos anfitriones o que tengamos que resignarnos solo a asistir como invitados a casa de otros.

*El lugar. Sitúa un espacio dentro del área que sirva como estación de bebidas, habilitándolo de manera que sea práctica y funcional.

*Completa. No deben faltar vasos de distintos tamaños para diferentes tipos de bebidas y tragos, además de copas para vinos. Si ofrecerás cervezas, puedes incluir jarras y vasos.

*Imprescindibles. Destapador, descorchador, removedores, servilletas y sorbetes. 

*El servicio. Si no dispondrás de los servicios de un bartender, las bebidas y enseres del bar deben estar dispuestos de manera que tus invitados puedan auto-servirse sin que les resulte complicado.

*Cantidad. Calcula previamente una cantidad promedio de las bebidas aproximadas que podría ingerir cada invitado para que tengas una idea de que cantidad necesitarás. Siempre compra más que la cantidad que estimes.

Bocadillos

Las opciones para estos son muy variadas, puedes ordenarlos o prepararlos por ti mismo, aunque si no tienes mucha practica en la cocina, lo aconsejable es que los encargues a algún profesional.

Toma en cuenta que:

*Los mariscos y los picantes no son tolerados de igual manera por todas las personas, por lo que es mejor escoger los que no los contengan.

*El menú debe ser variado y balanceado. No elijas solo piezas fritas. Selecciona variedades que contengan vegetales, carnes, quesos, cremas y salsas.

Mesa de quesos

Una idea que te hará quedar muy bien es montar una mesa de diversos quesos para el deleite de los asistentes. Necesitarás una tabla de madera que sirva como base, un corte de mármol o hasta un espejo. En cuando a la cubertería, ésta debe incluir cuchillos para cortar y untar, pinchos, tenedores, etc. Ésta mesa deben tener al menos cinco variedades de quesos, entre ellos uno blando, dos semi-blandos y 2 duros. Preséntalos sin la cáscara, si no se trata del Camembert o el Brie que se comen tal cual. Acompáñalos de mermeladas, frutas y tostadas y por supuesto, vino tinto.

Necesitaras auxiliarte de recipientes que te garanticen que tus entremeses calientes lo estarán al momento de servirlos, nada mejor para estos fines que los Chafing Dishes, si no tienes uno en casa puedes alquilarlo.

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