Por su parte, los dirigentes comunitarios y residentes del barrio explicaron que la empresa Metaloxsa, y Medio Ambiente removieron los desperdicios del reciclaje de baterías para automóviles que por 20 años, se había acumulado en los bajos de Haina.
Los residentes del lugar se aquejaron que la empresa recicladora de baterías se comprometió a asistir con medicamentos y servicios médicos a todos los niños y mujeres embarazadas afectadas por la contaminación con plomo, pero las promesas nunca se cumplieron.