Algunos meses las ofertas se destacan por la propuesta en si, y marzo será uno de estos – impresionantes voces y un finlandés que ama a nuestra tierra.
One voice, agrupación de Jazz vocal de la Universidad de Millikin estará en nuestro país realizando una serie de clínicas y talleres, traídos al país por la Fundación BoMana que dirige Luisa María Ortiz.
El octeto de voces es uno de las mejores en su género, su Director Stephen Widenhofer se ha encargado de que año tras año se conforme un grupo de la más alta calidad. Este año 8 jóvenes, acompañados por Widenhofer en piano (es tremendo pianista de Jazz) y un cuarteto de bajo, guitarra, batería y percusión harán entrega de un repertorio que lleva la música de los grandes maestros a otros niveles; el canto en armonía total, fraseo, scats en lugares inesperados y realizados con categoría hacen de esta música, ya compleja de por sí, una total satisfacción y deleite. Las voces, bien montadas y dirigidas, emulan en su estilo al Real Group de Suecia con un poco de Take 6 en sus fraseos. Única presentación es en el espacio de Jazz en Dominicana en Casa de Teatro el lunes 14 de marzo!!!
Paul Austerlitz, quien ha recibido influencias de los saxofonistas dominicanos, el maestro Tavito Vásquez y la leyenda Choco de León, viene a realizar dos conciertos en los espacios del Fiesta Sunset Jazz (viernes, 18 de marzo) y Jazz en Dominicana en Casa de Teatro (lunes, 21 de marzo) a entregarnos su fusión de jazz, merengue y música afro-dominicana como palos y pri-pri, basados en la onda merengue-jazzista que cultiva.
El etnomusicólogo, compositor, clarinetista y saxofonista, presentará una arista experimental con varias composiciones nuevas, fusionadas con gaga y canciones tradicionales, tanto haitiana como dominicana. Acompañarán a Paul músicos de probada calidad, como lo son: José Duluc, donde además de tocar percusión, cantará, bailará y ejecutará la armónica; Julito Figueroa, dedicado convertir la tambora en un instrumento de improvisación jazzistica; el maestro del piano Gustavo Rodríguez, uno de los mejores jazzistas del país; en el contrabajo acústico el inigualable Esar Simó y la acompasada batería de Wellington Valenzuela, un veterano de la batería y un icono de la música dominicana.
