¡Bueno! La ley de cine una ley de fomento a la industria del cine, de incentivo fiscales para productores, inversionistas, dueños de salas de cines, distribuidores, guionistas, actores, directores, en fin para todo aquel que realice actividades relacionadas con la producción cinematográfica directa o indirectamente.

Esta ley es un motor de arranque para hoteles, restaurantes, empresas de comida especializada para grupos (catering), choferes, taxistas, empresas de seguridad, bienes raíces, etc.

Hasta la fecha el cine local se realiza con inversión privada, empresarios como José Miguel Bonetti D, Manuel Corripio, Miguel Ángel Muñiz, Franklin Romero, Roberto, Carlos y Roberto Angel Salcedo, Archy Lopez entre otros, se arriesgan apostando al cine local basado netamente en los códigos de negocios, inversión, venta y recaudación para así retornar lo invertido, esperando en la mayoría de los casos recaudar por lo menos lo invertido.

El cine local en su mayoría es rentable, pero el riesgo es alto, los productores tratan de realizar películas lo mas comercialmente posible pero, nunca se sabe lo que a la gente le va a llamar la atención para salir de sus casas camino a una sala de cine y mas aun a gastar cerca de RD$500 pesos para ver una película, con la gran frase en sus mentes, “ojala que no sea un clavo”

Una película local en su mayoría cuesta alrededor de unos 25 millones de pesos incluyendo sus copias y promoción, para retornar esa inversión la película debe vender en los cines 50 millones de pesos puesto que la sala de cine se queda con el 50% de lo recaudado, el productor le devuelve al inversionista sus 25 millones y a partir de ese punto es que el productor puede ver algún tipo de ganancias, para eso es la ley de cine para que el productor pueda recibir 25 millones de pesos o más para realizar una película y le entrega a su inversionista en retorno un certificado emitido por la dirección nacional de impuestos internos por ese mismo valor que a su ves el inversionista lo deduce de los impuesto a pagar en ese año fiscal.

Esto quiere decir que el inversionista no tiene riesgos porque de todos modos tendría que pagar esa cantidad a impuestos internos, con la ley la película que recaude 50 millones de pesos le quedan inmediatamente 25 millones al productor para así poder tener mejores condiciones de producción, pagar mejores salarios y servicios y se dinamiza todo un sector. Que recibe a cambio el inversionista? Publicidad incluida gratuita.

La ley también crea el fonprocine que es un fondo para aquellos productores no afiliados a empresas grades que pueden financiar sus producciones, estos productores presentan sus proyectos a la dirección nacional de cine y una ves aprobado el proyecto se le asigna una cantidad de dinero a dicho productor para que este realice su película.

La ley abarca muchos otros aspectos y beneficios para el sector, pero que no vamos a mencionar por razón de espacio. La ley de cine un gran paso como nación, un país sin imagen no es nada.

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