Como una rosa

La verdad como el sol es resultado de la misericordia Divina, siendo algunas tan fuertes que requerimos filtros para exponernos a su intensidad, pero al filtrarlas cambiamos sus matices, distorsionando su pureza. La verdad, igual que una rosa, replandece al desnudo; agregar algo a lo perfecto, solo exaltará nuestras imperfecciones o discapacidades consiguiendo que una comprensión de 360 grados se convierta en un proceso o se limite a un concepto, pero no llegue a ser respuesta clave. Ahora bien, recuerda que los conceptos emitidos por filosofías o mentalidades no renovadas sobre “la verdad hecha vino”, son responsabilidad de su productor. Bebamos conscientemente esta copa y seamos libres, porque cuando se ama con la verdad, un corazón es el cielo, un sentimiento vale un mundo y una amistad es su hogar.