El peleador Gabriel Mercedes demostró su gran nivel mundial al prevalecer como campeón de América. Y de qué manera.
Mercedes se impuso al mexicano Damián Villa, ampliamente respaldado por el público que abarrotó el Gimnasio multiusos CODE II (ubicado en el municipio de Zapopan) y que encabezó la primera dama de México Margarita de Calderón.
“Como lo hice en Brasil obtuve la primera medalla, aquí vuelvo cuatro años después y revalido el título en el primer día de competencia, lo que significa que arrancamos con un buen pie, donde tenemos todavía los Juegos completos y ponemos en el medallero a la República Dominicana”, expresó Mercedes.
Gabi primero avanzó por “bye” y aseguró bronce contra el canadiense Jocelyn Addison; después fue por la plata, la cual obtuvo al derrotar al cubano Frank Díaz, que terminó 10-3.
Como era de esperarse, el final tenía que ser bien exigido. No era para menos, pues enfrentaba al mexicano Villa, un peleador que eliminó antes en su país a Guillermo Pérez, el azteca que le arrebató el oro a Gabriel Mercedes en los Juegos Olímpicos de Pekín.
Aunque no contra el mismo rival, la revancha está consumada.
Detalles del combate. El primer round fue favorable para Villa que aparentemente marcaba un camino de éxito. Pero el dominicano no se desesperó, al verse en desventaja 3-1.
Lo que continuaba era para más. Ambos combatientes definieron sus estrategias que fueron dando resultados, pero el azteca contando con el respaldo de sus compatriotas.
Gabi en el segundo empató con un golpe válido para dos puntos y luego se fue 4-3, pero el mexicano devolvió con otro doble. Aun así Mercedes finalizó delante 5-4.
Iniciado el tercer asalto Villa igualó 5-5, pero la reacción dominicana no tardó y con 1:26 para finalizar el combate, Gabi se ponía 6-5 y dominaba el combate hasta cuando restaban 40 segundos.
Se produjo un intercambio de puntos en el cual Villa se ponía 7-6 y después Mercedes conectaba para igualar 7-7.
Luego se produjo un ataque de Gabi al final, Villa salió del cuadro de combate y fue amonestado, lo que, por tener una anterior, dejaba al quisqueyano con el oro.
Pero el entrenador del mexicano protestó y su queja prosperó. El entrenador de Gabi, Miguel Camacho, también protestó, pero sin resultados.
En consecuencia muerte súbita o punto dorado.
Iniciada esta fase, hubo intercambio de golpes, sin marca para ninguno. Cruzado el primer minuto todo seguía en cero.
Luego, el mexicano intentó una entrada y Gabi penetró una patada en pleno abdomen del mexicano, que fue el golpe que le dio el oro.
